En primaria los niños aprenden a aprender, hacen suyo los aprendizajes y son significativos en su vida diaria.
En esta etapa surgen los momentos óptimos para el aprendizaje y la adquisición de hábitos.
El proceso de enseñanza -aprendizaje está dirigido a despertar en los alumnos su sentido crítico y reflexivo y favorecer el desarrollo de una personalidad rica, madura y solidaria. Presta a cada niño una auténtica atención personal, definiendo su perfil de aprendizaje y estableciendo objetivos de mejora para cada uno en estrecha colaboración con la familia.